El narcotráfico y la violencia a través de la música de los narcocorridos.

Los narco corridos son un subgénero del corrido, estilo musical popular de México, en sus letras hablan de los personajes relacionados con el narcotráfico y todos los elementos de su entorno. Intentan resaltar la figura de los narcotraficantes y reflejan las actividades delictivas a las que éstos están relacionados.

El corrido, como estilo musical, deriva del Romance y se remonta al siglo XVIII. Originalmente su estructura base era la siguiente: saludo y presentación a modo de prólogo, desarrollo de la historia, moraleja y despedida.

Precisamente, la principal característica del corrido es que cuentan relatos y en determinados períodos de la historia de México fue el factor clave en la tradición oral. Leyendas, historias reales y noticias se trasmitían a través del corrido y pasaban de boca en boca y de generación en generación.

Los narcocorridos y su mensaje de violencia.

Los narco corridos también cuenta historias aunque, no precisamente nada románticas o amables, al contrario. Las letras de los narco corridos son, presuntamente, sin intención alguna de defender las actividades delictivas de sus protagonistas o mucho menos realizar un juicio de valor sobre ellas aunque, a decir verdad, se puede interpretar todo lo contrario.

En los narco corridos la figura de los narcotraficantes no es solo encumbrada, también es exaltada y casi colocada en un altar como si se tratara de un verdadero modelo a seguir. Las actividades relacionadas a los narcotraficantes no son solo el tráfico de drogas, también se se vinculan con delitos de asesinato, tráfico de armas y seres humanos, lavado de dinero y secuestro.

Por lo tanto de modelo a seguir o ser referencia para las nuevas generaciones nada de nada, al contrario, encumbrar a delincuentes de la talla de los narcotraficantes como si fueran héroes es literalmente bizarro.

Los narco corridos también tienen presente en sus letras a las autoridades políticas y militares, aunque desde luego no les colocan en el sitial de privilegio de los narcotraficantes, muy por el contrario los posicionan como los malos de la película. Teniendo en cuenta los altísimos niveles de corrupción policial y política que presenta México, tampoco es para que éstos se rasguen las vestiduras o pretendan hacerse pasar por hermanitas de la caridad.

Los narco corridos cruzaron las fronteras de México y atravesaron América Central para convertirse también en música de culto popular en Colombia. Hecho nada extraño si observamos las realidades en cuanto al papel que juegan los narcotraficantes en dichos países, con los matices correspondientes y dándoles el toque nacional.

Los narco corridos colombianos hablan en sus letras de secuestros, la guerrilla, los para militares y claro, los semidioses que parecen ser los narcotraficantes también por ésas regiones del globo.

En México se promulgó una ley, precisamente para prohibir la difusión de los narco corridos, por entender las autoridades que evidentemente hacían apología del narcotráfico y estimulaban, indirectamente y no tanto, a las actividades delictivas. Hecha la ley, hecha la trampa; los narco corridos sobrevivieron a la prohibición de las autoridades y siguen sonando, porque no se puede prohibir a nadie escuchar música y claro, la venta ilegal en las calles junto con internet hacen el resto.

En YouTube por ejemplo fácilmente se pueden visionar los vídeos, los cuales tienen varias características en común; pistolas automáticas, rifles de asalto, personas asesinadas y claro, la figura del enemigo, es decir, la policía y los militares. Las calaveras también son otro símbolo que aparece reiteradamente en los vídeos de los narco corridos, evidentemente en alusión directa a la muerte.

Como os comenté, acceder a los vídeos y las letras de los narco corridos es muy sencillo, existen cientos de páginas webs y blogs defensoras del particular estilo musical de México, por lo tanto y, en ésta ocasión particular, entiendo no procede por mi parte colocar los enlaces hacia tales contenidos.

Una cosa es comentar una realidad y otra muy diferente es hacer apología del delito.

Fuentes:     Corridos / YouTube