El Martisor y su leyendas, creencia y práctica del mito del Martisorul hasta nuestros días.

El día 1 de marzo se celebra Martisorul, día éste que simboliza la llegada de la primavera. Una tradición típica de Rumanía aunque también celebrada en Bulgaria (la cual se conoce como Marteniţa) y en la República de Moldavia.

Martisorul es un símbolo románico por el cual los etnólogos a comienzos del siglo XX no apostaban por su supervivencia al paso del tiempo y, al contrario de ésto, se mantiene vivo hasta nuestros días rodeado de mitos y leyendas variopintas.

Tradicionalmente el Martisor se lleva durante todo el mes de marzo o hasta el domingo de Ramos e inclsuo hasta el día de San Jorge. Una vez finalizado el ciclo de días que la persona lleva el Martisor, el mismo debe colgado en la rama de un arbol frutal o de un rosal.

Martisor tradicional que regala a las mujeres en Rumanía, Moldavia y Bulgaria.

El Martisor es un pequeño objeto que suelen llevar las chicas colocado en el pecho a modo de adorno o en la muñeca en forma de pulsera; a éste lo caracterizan dos hilos trenzados, uno rojo y otro blanco, en modo de lazo. El rojo simboliza el invierno y el blanco la primavera, aunque dependiendo de las regiones los mitos dan diferentes explicaciones o interpretaciones sobre los colores mencionados.

Los Martisorul para colocarse en el pecho tradicionalmente adjuntan otros objetos, éstos también son considerados símbolos de la buena suerte. Los más frecuentes son el trébol, el deshollinador, la herradura, una tortuga, una mariquita, un corazón o una flor; los cuales según la tradición son portadores de salud, felicidad y buena suerte.

La tradición también contempla el regalar un Martisor acompañado de una flor típica de la estación por entrar, campanillas de invierno, jacintos o tulipanes.  

Las raíces históricas de Martisorul.

1 de marzo Matronalia, el día del Dios Marte para los romanos y de ahí el Martisorul.

Los orígenes de la celebración de Martisorul no son conocidos exactamente aunque su presencia dentro de las tradiciones rumanas, búlgaras y moldavas se atribuye a la base común Daco-Tracic de éstos pueblos. En el caso de Rumanía se situaría en la época anterior a la romanización de ésta y en el caso de Bulgaria en la época previa a su eslavización.

También se atribuye la celebración de Martisorul a los romanos, los cuales celebraban el primer día el año al comienzo de la primavera; el 1 de marzo era Matronalia, el día del Dios Marte. Éste, además de ser considerado por los romanos el dios de la guerra, también se consideraba símbolo de fertilidad y pureza. La dualidad de los colores también significaba algo diferente a lo que hoy representan, el rojo la guerra y el blanco la paz.

Algunos descubrimientos arqueológicos confirman que los Dacios celebraban la llegada de la primavera con Martisorul, el cual a diferencia del románico el cual simbolizaba con los hilos trenzados, éstos utilizaban pequeñas piedras de los mismos colores colocadas en un hilo de forma alternada. También se hacían Martisor con monedas de oro, plata o bronce, las cuales determinaban la posición social de quienes las portaban; la diferencia era que el trenzado se hacia con hilos blancos y negros.

Un detalle curioso que suma a todos los poderes atribuidos a Martisorul, los Dacios creían que además prevenían de las eventuales quemaduras provocadas por la exposición solar; además una vez hubieran florecido los árboles, colgaban sus Martisorul en las ramas de éstos. Por si fuera poco si al momento de colgar su Maritsorul en la rama del árbol frutal la persona pide un deseo, éste se cumplirá rápidamente.  

La tradición de Martisorul en Rumanía: Bucovina, Moldavia y Transilvania.

Martisor con sus tradicionales colores rojo y blanco con una moneda colgado en un árbol.

En ciertas zonas de las regiones rumanas de Moldavia y Bucovina aún hoy se mantiene la tradición de que las mujeres lleven colgadas monedas de plata u oro en hilos trenzados de color rojo y blanco. En los viejos tiempos, las mujeres debía llevarlo durante doce día y luego, con dicha moneda, debía comprar un trozo de queso blanco dulce, con lo cual ésta lograría ser dulce y guapa durante el resto del año.

También se decía que Martisorul haría que las mujeres gozaran de un cutis lozano y radiante por un largo período de tiempo. Incluso hoy, en algunas regiones de Rumanía, las madres cuelgan un Martisor con una moneda de plata en sus pequeños hijos para que sean protegido de enfermedades. Eso sí, las mujeres embarazadas deberán evitar ver el Martisor de éstos niños pues de ser así, sus hijos nacerán con una marca en su cuerpo.

En la región de Transilvania el Martisorul es llevado durante las primeras dos semanas a partir del 1 de marzo, para luego éste ser colgado en puertas y ventanas con la finalidad de alejar a los espíritus malignos. También en zonas rurales de ésta región son colgados pasados doce días en los cuernos de los animales de granja.

En la región de Dobrogea el Martisor las mujeres lo llevan hasta la llegada de las grullas y después éstos deben ser lanzados al aire para lograr la felicidad. En la Moldavia rumana la tradición milenaria de Martisorul también se practica de forma totalmente diferente, pues las mujeres regalan éste a los hombres, contradiciendo así la tradición misma. Al mismo tiempo, los hombres deberán regalar a las mujeres un Martisor el día 8 de marzo.  

Mitos y leyendas de Martisorul en la República de Moldavia.

El mito de Martisorul en República de Moldavia dice que el 1 de marzo la guapa primavera salió del bosque y observó, en medio de un claro, que de los arbustos asomaba una campanilla de invierno. La primavera, quiso ayudarla quitando la nieve y las ramas de los arbustos que la atrapaban e impidiendo floreciera.

El invierno, al detectar que la primavera intentaba ayudar a la campanilla de invierno, montó en cólera y llamó al viento para destruir la flor, y la campanilla, se congeló de inmediato y murió; acto seguido la primavera la cubrió con sus manos y se lastimó uno de sus dedos con las espinas de los arbustos, con lo cual brotó una gota de sangre caliente que al caer sobre la flor la revivió.

Así la primavera venció al invierno y los colores tradicionales de Martisorul, el rojo y el banco, simbolizan así la sangre de la primavera y la nieve del invierno.

El otro mito de República de Moldavia sobre Martisorul, dice que el sol bajó a la tierra en forma de una guapa joven, la cual fue raptada por un dragón el cual la secuestró en su palacio. Con ésto la tristeza se apoderó de las personas y la alegría desapareció.

El mundo se quedó sin sol y un valiente joven fue al rescate de la guapa joven; estuvo un año entero dentro del palacio del dragón hasta encontrarle para luchar con éste y al vencerlo liberó a la joven. Así el sol volvió a reinar sobre la tierra e iluminar a ésta llenándola de vida; así comenzó la primavera.

En tanto, la sangre del joven que luchó contra el dragón, poco a poco dejó su cuerpo cayendo sobre la nieve. El rojo simboliza la sangre del joven muerto que liberó al sol y el blanco representando la nieve en dónde ésta fue derramada.  

Martisorul en nuestros días.

Martisor artesanal para colgarse como un pin que incluye el tradicional lazo y sus colores.

Desde hace varios días y como todos los años, los puestos callejeros por las calles de Bucarest estaban vestidos del blanco y rojo de los Martisor; los vendedores de flores, que los hay por decenas en las calles de la ciudad, ofrecían los tradicionales ramos de flores que acompañan a Martisorul.

Sospecho que ésta tradición seguirá viva durante muchos años más no solo en Rumanía, también en los países que cito anteriormente; un mito rodeado de leyendas que a diferencia de otras creencias, resulta simpático y no condiciona negativamente a nadie.

Ciertamente una forma diferente y con miles de años de historia a sus espaldas de festejar la llegada de la primavera.

*Nota sobre ortografía: dadas las diferencias entre el alfabeto rumano y el nuestro, opté por castellanizar los términos, no obstante aquí adjunto al forma correcta de escribirlos. Martisorul – Mărţişorul (la u es vocal de unión con el artículo l; con lo cual la traducción literal sería: el Martisor) / Martisor – Mărţişor.

*Nota sobre las fuentes: dichas tradiciones las conocí de primera mano recorriendo las regiones mencionadas y los mitos los escuché directamente de los ciudadanos de los países citados en el artículo; por lo cual entiendo que las fuentes provienen de la propia tradición oral.

*Nota geográfica: entiendo importante distinguir cuando hago referencia a Moldavia como región de Rumanía y cuando lo hago como la República de Moldavia. 

*Contenido actualizado el 1 de marzo de 2017.