Cuando por intentar igualar se cae en la discriminación.

El término homomarental lo presentan como una diferenciación particular del significado del término homoparental. Homomarental se utiliza para referirse a la maternidad por parte de dos mujeres, es decir, una pareja homoafectiva o de lesbianas ejerciendo la función parental. Término éste que proviene del latín, paréntalis, y significa perteneciente o relativo a los padres o los parientes; otra acepción se refiere a uno o a ambos progenitores.

El término homomarental existe aunque no, es decir, porque repitamos algo en masa no significa de forma alguna que el término sea correcto o adecuado de aplicar en forma alguna.

Para la RAE homomarental no existe y homoparental sí.

Vale decir que otros vocablos a fuerza de décadas de repetición, violando las reglas gramaticales y hasta atentando contra la ortografía, han sido aceptados por la RAE (Real Academia Española). Insisto que de momento el término homomarental no es aceptado como válido por la RAE y se utiliza homoparental.

Parental no discrimina de forma alguna la tendencia sexual del progenitor, es genérico y por tanto abarcativo de las diferentes posibilidades. Aparte de homoparental encontramos aceptado por la RAE los términos maternal y paternal. La función de los progenitores por tanto, indistintamente de la tendencia o género sexual, es la de parental y para referirnos a la función por parte de dos personas del mismo sexo, independientemente de que sean mujeres u hombres, lo correcto es utilizar el término homoparental.

Hasta el momento se utilizaba indistintamente de tratarse de dos hombres formando una pareja homoafectiva o dos mujeres el término homoparental; aunque para algunos resulta discriminatorio y por tanto utilizan, para contemplar a dos mujeres ejerciendo la paternidad o maternidad, homomarental.

Considero resulta discriminatorio internar forzar un término para diferenciar la paternidad, es decir, el término homoparental, no diferencia en sí mismo si se trata de dos hombres o de dos mujeres ejerciendo la paternidad y lo encuentro más igualador. Claro que todo es cuestión de interpretación con lo cual entramos de lleno en el terreno de la subjetividad y los intereses particulares de cada uno.

Cuando nos referimos al ejercicio de la paternidad de forma alguna se determina si hacemos referencia a una pareja heterosexual, homosexual o si es ejercida de forma unilateral, es decir, por un hombre o una mujer sola ejerciendo tal función.

No volvemos a encontrar a ante un termino que distingue ni genero o tendencia sexual y ni siquiera el número de progenitores que ejercen la función.

Un niño con dos progenitores o tutores hombres es hijo igual y sus padres tanto es que sean dos hombres como dos mujeres. El modelo de familia evoluciona y debemos hacer partícipe a toda la sociedad en su conjunto de tal evolución, desenvolviéndose el proceso de forma natural, integrador y bajo el marco de la tolerancia.

Entre homoparental y homomarental hay más que diferencias semánticas.

Intentar diferenciar de forma constante entiendo no fomenta precisamente la igualdad de forma alguna, al contrario, aumenta las posibilidades de etiquetar mediante términos, los cuales no dejan de tener un contenido de fondo con su correspondiente mensaje subliminal y condicionador.

Cualquier término que no defina tácitamente el genero sexual, precisamente iguala y no discrimina. Cuando hablamos por ejemplo de paternidad responsable, tanto es que se haga referencia a parejas compuestas por un hombre y una mujer, dos hombres, dos mujeres, un solo hombre o una sola mujer. Paternal en éste caso es abarcativo de todas las posibilidades e independiente de las tendencias sexuales.

Entiendo no procede de forma alguna inventarnos términos que precisamente atenten contra la no diferenciación de género en determinadas circunstancias. La igualdad no es intentar diferenciar de forma compulsiva a los diferentes miembros de una sociedad, al contrario, pues la diferencias son las que al mismo tiempo nos igualan en derechos y obligaciones.

Por el momento y hasta que quien determina los designios de lengua española, la RAE, no manifieste lo contrario, el término homomarental no solamente no existe, quien lo utilice no está hablando o expresándose de forma correcta.

Uno cosa son los derechos, la igualdad, la tolerancia y la libre elección, elementos que siempre he defendido y defenderé, otra muy distinta es andar dándole patadas al diccionario y, mucho peor, un político utilizando un término inexistente por pura demagogia.

Las diferencias son precisamente los factores que nos igualan a los ciudadanos en derechos y obligaciones dentro de una sociedad; las diferencias enriquecen y de forma alguna van en detrimento de los intereses de sus miembros.

Probablemente para muchos es una simple cuestión de semántica y para otros, entre los cuales me incluyo, una cuestión de derechos y del efecto condicionador de las palabras.

¿Consideras oportuno utilizar el término homomarental? ¿Prefieres utilizar homoparental? ¿Cuáal es tu opinión al respecto?

Fuente citada: rae.es